–No abuses de los carbohidratos: Reducirás las posibilidades padecer caries o problemas en las encías si reduces el aporte de hidratos de carbono y evitas los dulces y bebidas
azucaradas.
–Limita los picoteos entre comidas: Sobre todo, si no cuentas con la opción de lavarte los dientes después. La placa bacteriana comienza a formarse veinte minutos después de comer.
–No fumes: El tabaco aumenta el riesgo de padecer caries o enfermedades de las encías como la periodontitis.
–Cepíllate los dientes cuidadosamente: Lo ideal es hacerlo después de cada comida, pero, si no existe otra opción, al menos debes cepillarte los dientes antes de irte a dormir. La operación debe durar
entre dos y tres minutos y realizarse con pequeños movimientos circulares hacia
delante y hacia atrás.
–No te olvides de las encías: Y tampoco de la lengua, el paladar y el interior de las mejillas, pues en ellos se acumulan también las bacterias que pueden provocar los distintos trastornos dentales.
–Usa un dentífrico con flúor: Es conveniente optar por pastas de dientes que contengan flúor en su fórmula, pues está demostrado que previene las caries. Renueva tu cepillo cada tres meses. O cuando las cerdas comiencen a verse gastadas. Estas, por otra parte, es preferible que sean suaves para evitar que dañen el esmalte dental.
–Aprende a usar el hilo dental: La seda dental permite eliminar los restos de alimentos ocultos entre los dientes, pero hay que usarla con suavidad, porque un uso demasiado vigoroso puede dañar las encías. Si la usas solo una vez al día, al igual que si optas por el cepillo interproximal, es mejor que lo hagas antes de acostarte.
–Acude a tu odontólogo regularmente: Debido a que ni siquiera un cepillado profundo consigue eliminar por completo la placa dental, las limpiezas de boca están recomendadas cada seis o doce meses. Igualmente, debes realizar una revisión de tus dientes al menos una vez al año.
Evaluación
- ¿Acudes de forma regular al odontólogo?
a. Sí, al menos dos veces al año. (0)
b. No. (6) - ¿Si no es así, cuándo fue la última vez que
estuviste en el odontólogo?
a. Un año. (3)
b. Un año y medio, dos años. (6)
c. Más de dos años y/o no me acuerdo. (12) - ¿Sabes cómo y porqué se forman las caries?
a. Sí, lo sé desde hace tiempo. (0)
b. No. (6) - ¿Sufres con frecuencia sequedad bucal provocada
por algún medicamento?
a. No. (0)
b. Sí. (3) - ¿Sabes qué son y a qué se deben la gingivitis y la
periodontitis?
a. Sí. (0)
b. No. (6) - ¿Te han tratado alguna vez de gingivitis o
periodontitis?
a. No, nunca ha sido necesario. (0)
b. Sí, he estado en tratamiento. (3)
c. No, pero creo que es necesario. (6) - ¿Has tenido caries los últimos 12 meses?
a. No. (0)
b. Una. (3)
c. Más de dos. (6) - ¿Te sangran las encías al cepillarte?
a. No. (0)
b. Sí, sólo en la de algunos dientes. (3)
c. Las encías en su totalidad. (6) - ¿A veces las encías se te infaman o enrojecen?
a. No. (0)
b. Sí. (6) - ¿Aprietas y rechinas habitualmente los dientes
mientras
duermes?
a. No. (0)
b. No lo sé. (3)
c. Sí. (6) - ¿Te muerdes las uñas?
a. No. (0)
b. Sí. (6) - ¿Con qué frecuencia te cepillas los dientes?
a. Tres veces al día. (0)
b. Una vez al día. (3) - ¿Cada cuánto tiempo cambias de cepillo de
dientes?
a. De tres a seis meses. (0)
b. Una vez al año. (3)
c. Cada dos años. (6) - Si fumas cigarrillos, cuántos te fumas al día.
a. Ninguno o dos. (0)
b. Media caja. (3)
c. Más de una caja. (6) - ¿Tomas café, té u otra infusión con azúcar?
a. No. (0)
b. Sí. (3)
De 0 a 20 puntos: Todo parece indicar que gozas de
una óptima salud bucodental, y sigue las
instrucciones del odontólogo. Probablemente sufras
de algún pequeño problema que se atiende con una
visita al dentista.
De 20 a 45 puntos: Muestras riesgo de formación de
caries y de contraer gingivitis y periodontitis. Acude
sin demora al odontólogo para una revisión.
De 45 puntos en adelante: Muestras una seria
despreocupación por tu salud dental. Es posible que
ya tengas alguna enfermedad de este tipo que debe
ser tratada con urgencia por un odontólogo.
Recuerda que este test no sustituye un adecuado
diagnóstico ni revisión por un profesional de la
odontología, por lo cual te recomendamos que
consultes a este especialista de manera regular para
cuidar de tu salud
bucal.